Por más que pase el tiempo, parece que C. Tangana siempre será capaz de sorprendernos. Lo hizo con el inesperado lanzamiento de “Nunca Estoy” y“Guille Asesino”, y ahora lo hace también para descubrirnos su EP “Bien:(”con el que cierra el viaje creativo iniciado hace unas semanas con aquellos dos adelantos. Un nuevo proyecto con el que El Madrileño rompe las reglas de su propio juego, para vestir su propuesta con nuevas ideas estéticas y sonoras.
El enorme éxito de “Nunca Estoy” – directo al #1 en todas las plataformas y primer nº 1 español de streaming de 2020, dos semanas consecutivas – ha puesto sin duda la alfombra roja para la llegada de este nuevo trabajo.
Un EP en el que Pucho captura el momento creativo en el que se encuentra, acompañando estos tiempos tan particulares y mostrando su lado más íntimo y aventurero; en una oda al optimismo, la ambigüedad o el mirar hacia adelante. Así rusowsky – uno de los representantes de la nueva escena emo madrileña – se une a Alizzz para poner música a “Bien:(“, una evocadora intro con sabor a track en sí mismo, a la que añade todavía más matices la pieza visual de animación, dirigida por Little Spain y realizada de la mano de Marc Torices bajo la animación y producción de Bliss, que la complementa.
Toda una declaración inicial de intenciones para un tracklist que recorre esa compleja red de dualidades que conforman todas nuestras relaciones: desde el amor y la agresividad, hasta la decadencia y la nostalgia, o desde lo cotidiano hasta lo más sexual. Conceptos que se cruzan en una gran simbiosis entre el espacio sonoro del Pop más emocional y las claves de la música urbana, pero que C. Tangana ha construido a su medida a través de temas como “Nunca Estoy” – con producción de Alizzz & Nineteen85- o ese “Guille Asesino” producido por Alizzz y Pional. El Ep incluye además una última sorpresa como “adelante_ruffdemo2016”, un viejo descarte de su álbum “Ídolo”, pero que mantiene toda su vigencia y adquiere ahora un nuevo significado como Outro del proyecto.
Con “Bien:( EP” C.Tangana abre la puerta que nadie esperaba, hacia una madurez sonora que ya parece inevitable. Un nuevo punto de inflexión para su música y su personaje, de los que hoy más que nunca, resulta imposible adivinar qué será lo próximo.