La Beba, la nueva promesa del pop urbano, debuta con su primer EP titulado MQ, una obra que fusiona sus trabajos previos y añade un toque fresco con dos nuevos temas

Con este lanzamiento, La Beba cierra una etapa de presentación para consolidar su identidad artística, siendo “MQ” la culminación de un proceso que gira en torno a un mensaje contundente: el amor propio.

El EP recoge algunos de sus éxitos más recientes como “Tóxica y cara”, “En loop”, “No me fucking importa” y “Xulita”, a los que se suman dos inéditos: “Femme Fatale” y “MQ”. En estas nuevas canciones, La Beba profundiza en una temática que ha sido constante en su obra, el amor propio, un concepto que ya se vislumbraba en sus temas anteriores, pero que ahora toma forma bajo el potente lema MQ (ME QUIERO).

Un videoclip cargado de simbolismo

En el vídeo de MQ queda patente de forma visual esta dualidad entre el amor romántico y el amor propio. La letra de la canción, los contrastes sonoros y los cambios de estilo musical reflejan esa batalla interna entre la necesidad de ser querido por otros y la importancia de quererse a uno mismo.

Un himno contra los estereotipos

Con MQ, La Beba propone un cambio de paradigma social. El foco deja de estar en la validación externa para centrarse en el autoconocimiento, la aceptación y el amor propio. En un contexto donde los estereotipos estéticos y los ideales de perfección alimentados por las redes sociales nos empujan a compararnos y a sentirnos insuficientes, La Beba desafía estas nociones y plantea una revolución personal. MQ es una llamada a romper con las expectativas irreales y encontrar en uno mismo el amor más auténtico.

El concepto del EP se convierte así en un himno contra el “amor romántico” tradicional, representado simbólicamente en los osos de peluche, para celebrar el amor propio como el verdadero refugio. “MQ” defiende que no somos “medias naranjas” esperando ser completados por otros, sino naranjas completas, suficientes tal y como somos, sin necesitar de una pareja o la aceptación social para sentirnos plenos.