A Lucía Fernanda se le caen de los bolsillos el carácter y el estilo, con ese torrente flamenco que corre por sus venas y que ella pasa por el filtro de la música del nuevo siglo. Este martes 25 de junio estrena “La Manta”, el tema que pone en marcha la carrera de una artista con una fuerza especial. La dulzura de su voz se engancha a una producción de aire electrónico y latino. Es una mezcla poderosa que augura un más que prometedor futuro.
La manta es el punto final de un período de dos años de aprendizaje y el inicio de una serie de singles que conducirán a su primer álbum, a inicios de 2020. En estos últimos 24 meses, Lucía Fernanda estudió música en Cambridge y escribió sus canciones como si de un diario se tratara. La conexión con el equipo de productores hizo el resto. Surgió así una nueva fusión para un estilo, el flamenco, llamado a reinventarse.
“Quiero hacer algo nuevo, una propuesta distinta, personal”, confiesa la artista, de 23 años. Las bases electrónicas y su voz aflamencada son las coordenadas de “La Manta” y de Lucía Fernanda, consciente de que sigue un camino, el de la fusión del flamenco, que ha tenido en los últimos años ejemplos de impacto universal.
El tema con el que inicia su carrera representa “la idea de la liberación de pensamientos y de sentimientos, es eso que pasa por tu cabeza estando unas horas de meditación envuelta en una manta”, describe. Y añade: “Es como echarse la manta a la cabeza, es un ya me da igual, una decepción y un alivio al mismo tiempo. Pero, sobre todo, es una reflexión que deriva en una decisión”.
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