Artista inclasificable comienza su andadura con Camino Ácido (2014), aquel desconocido Angel Stanich de voz extraña, barba y cabellera hirsuta, se ha convertido en una de las referencias de renovación musical más vigorosas y aclamadas por músicos, medios y público. Una frenética actividad de incontables conciertos y festivales que, sin concesiones promocionales ni entrevistas, sorprende a todos con una insólita personalidad salpicada de imágenes cinéfilas, ingenio surrealista e ironía. Una travesía apuntalada por sutiles himnos generacionales como Carbura! (Cuatro Truenos Cayeron, 2015), christmas envenenados (Jesús Levitante) y, ya al filo del verano del 2017, Siboney, un exuberante EP que clausura ciclo y abre la puerta a nuevas e insospechadas aventuras, al deslumbrante universo de su nuevo álbum, Antigua Y Barbuda. En 2021, vuelve con un EP llamada “Una Visión Global Bastante Aproximada”.