Pol Granch publica su primer álbum, “Tengo que calmarme” el viernes 26 de junio
El Pol Granch singular y camaleónico que emerge con fuerza en 2020 explota sus mejores facetas en Tengo que calmarme, su álbum de debut, en la calle desde este mismo viernes. Pero antes, hoy, un nuevo anticipo: Chocolatito, con su desenfadado romanticismo, otra pequeña joya de un artista cada día más querido que al fin presenta su primer trabajo.
Llega Granch a Tengo que calmarme con el crédito de un deslumbrante 2019, el año que transitó de joven promesa a respetado cantante y compositor, uno de los más importantes del momento. Con su desbordante sensibilidad por bandera y unas canciones tan emocionantes como versátiles, Granch se ha convertido en el músico aparte que prometía ser cuando apenas despuntaba.
Chocolatito es una broma de buen gusto, como bien refleja su vídeo: una producción entre bucólica y glam con espíritu de los setenta, perfecta para acompañar los compases de una canción con vocación de hit. Es el mismo encanto de otros temas ya conocidos e incluidos en el álbum, como Millonario, con su pop íntimo y sugerente, dominado por su indiscutible voz; En llamas, una inyección de emoción, con la colaboración de Natalia Lacunza; M conformo, y por supuesto la muy romántica Te quiodio, con la que acumula millones de streams.
A golpe de canción, Granch crece como un artista distinto y como una de las apuestas más convincentes para este año. De padre francés y madre española, Pablo Grandjean –su verdadero nombre– rebosa energía, canalizada a través de una variedad estilística que le permite transitar del pop al trap y del rap al rock.
Ese Tengo que calmarme que da título al disco es algo más que el nombre de un tema. Es un eslogan, un propósito y una obsesión: la de un joven que aún busca su sitio. “Tengo que esforzarme, tengo que relajarme, tengo que confiar más en mí… Tengo que calmarme”, se explica. Granch quiere más, sabe que puede dar más, y esa inquietud que recorre sus venas se transforma en el combustible de obras tan redondas como las que forman parte de este primer álbum, producido en su mayor parte por Paco Salazar junto a otros productores como Luis Sansó (Luichi Boy) e Iñaki de las Cuevas.
Con Tengo que calmarme se consolida el Pol Granch conocido e irrumpe su versión 2020: un Pol inquieto como pocos, portador de un mosaico de sentimientos que, pegados como teselas, ofrecen una visión panorámica de un artista que demuestra a cada gesto su pasión por la música.
Además, ya trabaja en lo que será la presentación de su álbum en directo. Tras los ‘sold outs’ protagonizados en Madrid en 2019, las primeras primeras fechas confirmadas para este año son:
24.07 Madrid :: La Riviera
31.07 Murcia :: Plaza de Toros
03.10 Santander :: Centro Botin
18.10 Alicante :: Sala The One
14.11 Barcelona :: Sala 2 – Teatro Apolo
27.11 Pamplona :: Sala Totem
11.12 Valencia :: Sala Cruz
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